Sistema portátil ayuda a predecir ataques de asma

Un estudio reciente describe un sistema integrado portátil, que monitoriza el entorno del usuario y otros atributos físicos, con el objetivo de predecir y advertir sobre los ataques de asma.

 

El sistema para el seguimiento de la Salud y del Medio Ambiente (HET), fue desarrollado en la Universidad Estatal de Carolina del Norte (NC State, Raleigh, EUA) y en la Universidad de Carolina del Norte (UNC, Chapel Hill, EUA) e incorpora una serie de novedosos dispositivos de detección integrados en una pulsera, así como en un parche adhesivo que se coloca sobre el pecho, los cuales incluyen sensores que hacen un seguimiento del movimiento del paciente, su frecuencia cardiaca, su frecuencia respiratoria, la cantidad de oxígeno en su sangre, la impedancia de su piel y las sibilancias.

 

La pulsera se centra en gran medida en los factores ambientales, hace el seguimiento de la cantidad de compuestos orgánicos volátiles y del ozono en el aire, así como de la humedad y la temperatura del ambiente. La pulsera también incluye sensores para registrar el movimiento, la frecuencia cardíaca y la concentración de oxígeno en la sangre. El sistema también incluye un componente que no es para llevar puesto, un espirómetro, en el cual el paciente debe respirar varias veces al día con el fin de medir la función pulmonar. La información proveniente de todos estos sensores es transmitida de forma inalámbrica a un computador, donde un software personalizado para el cliente recoge y registra toda la información. El estudio fue publicado el 26 de mayo de 2016, en la revista IEEE Journal of Biomedical and Health Informatics.

 

“En la actualidad, se les pide a las personas con asma utilizar cada día un medidor de flujo máximo con el fin de medir su función pulmonar a diario. Esa información se utiliza para establecer la dosis de los medicamentos recetados que deben utilizar en sus inhaladores”, dijo el autor principal, James Dieffenderfer, un estudiante de doctorado del programa conjunto de ingeniería biomédica de la NC State y la UNC. “Para el HET, hemos desarrollado un espirómetro autoalimentado y personalizado, que recoge la información más exacta sobre la función pulmonar y alimenta esa información al sistema”.

 

“Nuestro objetivo era diseñar un sistema portátil que pudiera realizar un seguimiento del bienestar del paciente y, en particular, proporcionar la infraestructura para predecir los ataques de asma, de manera que los usuarios puedan tomar medidas para evitarles el tener que cambiar sus actividades o su medio ambiente”, dijo el autor principal y profesor asistente de ingeniería eléctrica e informática, Alper Bozkurt, PhD, de NC State. “Una vez que se tenga esa información, el centro puede iniciar el desarrollo de un software que hará de forma automática un seguimiento de la información de usuario y les dará a los usuarios una advertencia anticipada de un posible ataque de asma”.

 

En los pacientes asmáticos, la inflamación latente de los tubos bronquiales generalmente se extiende mucho antes de que los pacientes realmente sienten nada. Si la inflamación es intensa, las vías aéreas se contraen y el paciente sufre un ataque de asma. Los ataques pueden ser tan graves que el paciente tiene que ser hospitalizado, razón por la cual muchos enfermos de asma toman regularmente medicamentos antiinflamatorios. Anteriormente, la única manera de detectar la inminencia de un ataque de asma era llevando a cabo exámenes pulmonares para determinar si la respiración del paciente contenía niveles elevados de monóxido de nitrógeno (NO), lo cual es indicador de un ataque de ese tipo.

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